Hay dos grupos de personas: las que son conscientes de las repercusiones de sus actos y las que no.
Una de las actitudes que más impacta en nuestro entorno llega a la hora de comer ¡Lo que tú comes repercute en el Planeta!
El 70% de lo que se planta en el planeta, se dedica a la alimentación de los animales y luego esos animales sirven de comida a las personas.
Si comes directamente de lo que se planta, tu acto no tiene repercusión y cada vez abra menos hambre en el MUNDO.